Navarro impecable marca la diferencia

Las expectativas estaban altas, y Barça y Madrid estuvieron a la altura.

Partidazo en el Palau, con victoria para los locales por 96-89, lo que le quita al líder la condición de invicto tras catorce jornadas. Eso solo lo podía hacer el Barcelona, eso solo lo podía hacer Juan Carlos Navarro. Su perfecta actuación, con 33 puntos, 5 triples y solo un tiro de campo fallado, alejaba a los de Xavi Pascual en un marcador que estuvo igualado en todo momento.

El Madrid nunca bajó los brazos, pero Llull no destacó como suele hacerlo, y Rudy, que se fue apagando poco a poco, se vio derrotado por un, de nuevo, espléndido Navarro.

Con Sergio Rodríguez al mando, muy metido en el encuentro, los blancos acortaban distancias y se ponían por delante en el marcador a dos minutos para el descanso. El partido volvió a girar a favor del Barcelona, que, con Lorbek y un buen juego interior, y La Bomba y Sada fulminando desde la línea de tres hacían que el resultado en el descanso fuera 45-44.

El capitán culé fue sin duda el héroe de los suyos, y con una facilidad suprema sumando puntos, recordaba a todos por qué son los actuales campeones de liga.
El tercer cuarto finalizaba con un triple maestro, que ponía tierra de por medio a favor del equipo catalán, 73-64.
Se dejó ver Wallace en el último período, anotando dos canastas vitales desde la línea de tres, que decantaba la victoria a favor de los culés.
El clásico se tiñó de blaugrana, importante victoria que termina con la racha de 14 victorias consecutivas del Real Madrid.
Bravo, Juan Carlos.